Existen algunos métodos de lectura que ayudan a los niños a desarrollar habilidades cognitivas específicas. Algunas de estos son la concentración, la observación y la capacidad de asociar letras o palabras con imágenes. Por ejemplo: la grafía «sol» con el dibujo de un sol amarillo, entre muchas otros.

Evidentemente, cada niño aprende a leer según su crecimiento y desarrollo. No obstante, el sistema educativo determina los seis años como la edad apropiada para enseñar a un niño a leer. Tanto si deseas inculcar la lectura en casa o como docente, deberías conocer las distintas metodologías que se pueden aplicar. Te contamos de qué va cada una, así como cuáles son sus pros y contras. Y si quieres formarte para educador/a, te recomendamos estudiar nuestra maestría en Pedagogía Montessori. Así te capacitarás para diseñar planes didácticos de aprendizaje a través de las metodologías más efectivas e innovadoras.

El proceso de aprendizaje a través de métodos de lectura

Leer y escribir son dos habilidades que se adquieren en las primeras etapas y están estrechamente relacionadas. En el caso de la escritura, además de capacidades cognitivas y psicológicas, necesita de habilidades motrices. Con esto nos referimos a saber coger un lápiz correctamente y a ser capaz de escribir de forma alineada.

Un de los métodos de lectura ideales para que los niños aprendan a leer y escribir es que lo vean como un juego. Ya sabrás que a esta edad, ellos están ávidos de recibir información. Por ello quieren saber todo cuando ven textos o letreros en su día a día.

Por tanto, la cuestión de aprender a leer y a escribir no debería ser un requisito académico. Al contrario, deberían asociarlo a actividades divertidas, interactivas y creativas que les permitan continuar explorando el mundo a su manera. De este modo, es importante que, antes de los seis años, se familiaricen con letras y palabras. Además, no se deberían establecer horarios para leer o escribir. Es decir, tampoco es adecuado inculcarles la lectura de cuentos infantiles de una manera forzada y obligada.

Técnicas de lectura en la infancia

Existen diferentes métodos de lectura para enseñar a los más pequeños. Los más comunes son los siguientes, te los explicamos a continuación.

Método tradicional o método sintético

El método sintético o tradicional consiste en que los niños y niñas primero aprendan el abecedario. Es decir, las letras vocales y su grafía. Conforme aprenden letras sueltas, agregan su sonido y su combinación entre sí. Después, construyen palabras y posteriormente las frases. Así, desde las letras a las oraciones más complejas, los niños y niñas aprenden a leer sin ayuda. De esta forma, comprenden el significado de lo que leen y lo explican con sus palabras.

Método analítico o global

El siguiente es uno de los métodos de lectura que busca que los pequeños se adentren en el mundo de las palabras a través de imágenes asociadas. Por ejemplo: la palabra «árbol» y su grafía a lo que se suma la imagen de un árbol. A partir de esto, los niños y niñas asocian, desde un inicio, el mundo de la escritura al de la lectura. Así, aprenden ambas cosas al mismo tiempo y sin darse cuenta.

A diferencia del sintético, el método analítico va de las frases y palabras al conocimiento específico de cada una de las letras. Es decir, de lo complejo a lo simple. Se considera más moderno y dinámico, aunque genera dudas en torno a las faltas de ortografía.

Hay quienes dicen que, al no enseñar el abecedario primero, algunos niños aprenden a leer y a escribir con errores de ortografía. Ante ello, se debe enseñar esta técnica al mismo tiempo que las reglas ortográficas.

Método Doman para enseñar a leer

Esta técnica fue ideada a mediados del siglo pasado por el médico estadounidense Glenn Doman, quien se dedicó a enseñar a niños con lesiones cerebrales a leer. Hoy, por sus buenos resultados, se aplica en todo el mundo como uno de los métodos de lectura más efectivos.

Según el propio Doman es posible que bebés de menos de tres años aprendan a leer si se les provee de materiales adecuados y grafías de buen tamaño. Por ello es considerado el creador de los bits de inteligencia que son láminas de fondo blanco (para que solo destaque lo importante), con una palabra y una imagen asociada. Dichas láminas están por categorías: animales, plantas, medios de transporte, profesiones, etcétera.

El método Doman se percibe superior al silábico y motiva el aprendizaje autodidacta en edades tempranas. Aunque es criticado por los constructivistas, es decir, por los defensores del aprendizaje estructurado y por etapas.

¿Cómo hacer que los niños disfruten la lectura?

Alguna vez te has preguntado: ¿cómo hacer que a los niños les guste la lectura? ¿cómo incentivarlos a leer? La respuesta es sencilla. Si tú lees, tu hijo o alumno adquirirá el hábito también. Si diariamente lees revistas, libros o el periódico, al pequeño a tu lado también le fascinará. Tiene lógica: en esto, como en la vida diaria, tú eres su ejemplo a seguir.

En efecto, cuando a un adulto le gusta leer y considera que es una actividad lúdica y creativa, los niños y niñas a su alrededor captan el mensaje. Al ver esto constantemente, sentirán curiosidad por saber qué se esconde en las páginas de un libro. Así, quedan atrapados ante un mundo de infinitas posibilidades. Esto es así porque los libros les permiten conocer personajes maravillosos, nombres curiosos, sitios llenos de aventura y otras formas de vivir.

Como ves, existen diversos métodos de lectura que pueden ayudar a los pequeños. Sin embargo, hay niños y niñas a las que se les da bien unos, mientras que otros lo tienen más fácil con diversos métodos. Lo importante es que la lectura llegue a ellos como algo divertido y no como una obligación. Sin duda, si entienden que a través de los libros tienen acceso a nuevos mundos a través de su imaginación, querrán leer como si fuera una aventura.