La conciencia ecológica cada vez está más presente en la vida diaria de las personas que tienen interés en proteger el medio ambiente. Es por ello que ante esta inquietud, nace la ecoescuela en diversas sociedades. ¿Te gustaría trabajar en una de ellas? Fórmate con Nuestra Maestría en Monitor de Educación Ambiental y vuélvete un experto en el tema.
Índice de contenidos
¿Qué es la ecoescuela?
Es un centro educativo que ha añadido la sustentabilidad en su metodología pedagógica y gestión cotidiana. Básicamente, una escuela ecológica tiene el objetivo de enseñar los patrones de la sostenibilidad y el cuidado ambiental.
Para crear o empezar una escuela ecológica no es necesario hacerlo desde la nada. En verdad, es posible reacondicionar centros escolares ya existentes y transformarlos en ecoescuelas que busquen el mismo propósito.
¿Cómo es su metodología?
Las ecoescuelas funcionan en dos niveles: la educación medioambiental sostenible de sus alumnos y la gestión ecológica en su organización.
Bajo estos parámetros, los alumnos de una ecoescuela saben técnicas e ideas ecológicamente valiosas. También, aprenden información sobre las actividades que benefician más a un modelo de vida sustentable. Incluso, la formación es integral y adquieren valores ecológicos para poner en práctica en su día a día. Además, no solo los pequeños aprenden nuevos hábitos, los profesores, padres y madres, y administradores tienen y se adaptan a esta mentalidad.
Así, los alumnos se comprometen con el cuidado ecológico de su localidad y entorno al ver que los mayores también actúan bajo estos valores. Con ello, poco a poco participarán dentro y fuera de la escuela en acciones de mejora con absoluta naturalidad.
Beneficios de una ecoescuela
Como hemos mencionado anteriormente, la ecoescuela promueve los valores medioambientales desde las primeras etapas, provocando que tanto el lugar de aprendizaje como el entorno de cada niño sea protegido bajo estas ideas. A continuación, te contamos otras ventajas de meter a tus hijos a una escuela ecológica.
Concientización del cuidado ambiental
Toda la comunidad educativa se sensibiliza con el cuidado y la protección de la naturaleza a través de acciones que involucren a todos los participantes. Por lo tanto, se fomentan valores como la cooperación, el trabajo en equipo y la responsabilidad.
Mayor calidad de vida en el medio ambiente
En las escoescuelas es básico realizar actividades positivas que promuevan la protección y el desarrollo sostenible. Por ejemplo, la creación de huertos urbanos o la separación de residuos es la mejor manera de educar y proteger al entorno natural. Esto es así porque la contaminación se reduce al mismo tiempo que todos aprenden.
Participación proactiva
Dentro de las escuelas ecológicas es básico el aprendizaje y la importancia de desarrollar e incentivar la participación. El objetivo de ello es formar niños que quieran ayudar al ambiente y se involucren con su comunidad de manera activa en la resolución de problemáticas. También, a que sean conscientes que la implicación y la acción generan resultados positivos.
Reducción de costes
Se producen ahorros significativos en el gasto energético y de agua, debido a las acciones que los alumnos hacen para proteger el medioambiente. Entre ellas estarían:
- Apagar las luces al salir de las aulas.
- Cerrar las llaves de agua cuando no estén en uso.
- Reutilizan productos u objetos que, en otros casos, serían residuos.